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lunes, 1 de octubre de 2012

Vuelven los sesenta con Moschino

 Moschino rescata lo mejor de los años sesenta. Courrèges, Rabbane, Mary Quant vuelven al siglo XXI

Moschino nos ha trasladado a la época que revolucionó la moda, los sesenta. Rabbane, Courrèges y Mary Quant han renacido con sus minifaldas, sus patrones de silueta en A, sus rayas estampadas... incluso el sombrero inspirado en los cascos del ejército que Courrèges ideó y que Audrey Hepburn convirtió en objeto de culto, ha estado presente. 



En blanco y perfilados en negro, tal y como hacía Courrèges, los trajes de chaqueta, los miniabrigos, las minifaldas y los minivestidos se articulan en torno a patrones de líneas sencillas, donde el estampado de rayas aporta el movimiento y el ritmo. Desde ahí pasamos a los brillantes plateados que traen a nuestra mente el esplendor de Rabbane, con sus pequeños vestidos metálicos.


El golpe de color ha llegado en forma de sexys minivestidos, con aberturas en la espalda, formas geométricas en azul, rojo, amarillo, rosa, estampados florales, jumpsuits acampanados con prints geométricos...

Y de esta explosión de color, llegamos hasta un final que, se ha teñido de un inmaculado blanco, con líneas más sueltas y efectos troquelados, creando un cierre lleno de pureza. 


Los complementos han sido otra de las claves de la colección. En ellos hemos reconocido las formas de Courrèges, así como hemos visto a Rabbane en el brillo de los zapatos y en las joyas XXL, con sus tonos brillantes.

Definitivamente, los sesenta han vuelto.  

 






 

Las dulces propuestas de Missoni

Missoni nos hace soñar con el verano en días lluviosos como hoy. Sus vestidos bohemios, sus dulces colores... no se nos ocurre mejor compañero para los días de estío

Un inocente comienzo en blanco anunciaba un desfile dulce, con vestidos vaporosos y fáciles de llevar, nacidos para el verano, porque así es Missoni.
Los tonos salmón, rosa y lila en degradé, tiñen unos vestidos de líneas muy sueltas, que van ganando en volumen a medida que se acercan al suelo. También los apreciamos en chaquetas oversize, cuajadas de paillettes, que emulan la piel de una sirena. El print en zig-zag que distingue a la firma ha estado muy presente, en tonos verdes, rojos, amarillos azules... el color en Missoni es diversión, ritmo y fuerza. Surca las prendas imparable, en forma de cenefas geométricas que toman mil y una formas diferentes.


El aire boho de los vestidos, que brillan gracias a los bordados con hilos metálicos, contrasta con las mallas estilo ciclista y los ajustados culottes combinados con ceñidos tops. Los mismos códigos se emplean para los trajes de baño, que atraen todas las miradas gracias a los prints de la casa. Pero es en los accesorios donde se advierte la doble naturaleza de Missoni: un espíritu romántico que a la vez es práctico y urbano. De este modo, las gargantillas de flores que ocupan todo el cuello y que nos hacen soñar, tienen un práctico contrapunto en los bolsos bandolera. Las grandes gafas de sol, por su parte, son el toque chic de las chicas Missoni. Así que tenemos: pinceladas bohemias, complementos prácticos, toques elegantes y prendas cien por cien ponibles para el verano. Son los ingredientes de la receta perfecta.



La diseñadora Angela Missoni no ha recurrido al emblemático zigzag de su firma pero las líneas y especialmente las diagonales han ocupado un lugar destacado en su propuesta. Bien en forma de estampados o bien en las costuras y trabajo en ‘patchwork’. Así las secciones que dividen las creaciones y degradaciones de color dibujan una silueta recta mientras las curvas femeninas sólo hacen acto de presencia en sensuales ‘bodys’ de inspiración sesentera.

ALBERTA FERRETTI. P/V 2013

              Alberta Ferretti ha ideado una colección llena de magia y referencias al fondo del mar, personificado en vaporosos y sensuales vestidos, la pieza estrella de la colección

Con el cabello todavía húmedo han desfilado estas ninfas del agua y de la tierra que tan pronto incorporaban elementos marinos a sus atuendos como cubrían su torso en hojas. Flecos que emulan corales, apliques metalizados en varias tonalidades que reproducen la iridiscencia del nácar, tejidos vaporosos en delicados tonos azules que imitan las olas y hasta redes para remitirnos al medio acuático. En suelo firme, los vestidos ajustados en las piernas que estallan en flores y hojas sobre el cuerpo transparente evocan a la Dafne de la mitología y la escultura ¿El resultado? Un armonioso y romántico compendio inspirado en la naturaleza en estado puro.

     

Su colección  esta llena de suavidad, dulzura y prendas muy femeninas se han subido a la pasarela de Alberta Ferretti. En ella casi hemos podido sentir la brisa del mar, dejándonos hechizar por el canto de sus sirenas.
Las sensualess transparencias se combinaban con delicadas flores, adheridas al cuerpo de las modelos formando una piel floral, que nos transporta a un mundo onírico. Si bien la colección comenzaba en blanco y nude, el desarrollo hacia tonalidades marinas y las aplicaciones vegetales, le han dado ese carácter de ensoñación, como salida de las páginas de Sueño de una Noche de Verano.




Siluetas vaporosas y todo un ensayo sobre las diferentes tipologías de escotes - en uve, Diana, corazón...- se han desgranado en estos románticos vestidos, que han dominado una propuesta en la que el pantalón se ha reducido a una sola salida, en versión short. 


También se ha apreciado algún toque de los años 20, en las líneas sueltas, los flecos bordados, los bolsos de mano y el brillo de las paillettes, aunque ésta loca década se sumerge bajo las corrientes marinas. Éstas aparecen desde el peinado de efecto mojado de las modelos, hasta el acabado brillante de los vestidos, que con sus paillettes evocan el fondo marino y el brillo de los bancos de peces.

Y así, entre ninfas y sirenas, las mujeres de Ferretti se deslizan, elegantes y femeninas, por una pasarela llena de magia.

 

GUCCI P/V 2013

Un estallido de color celebra la primavera que Frida Giannini ha concebido para el año que viene. Fucsia, blanco, azul, verde agua y mostaza se suceden en una propuesta que vuelve la mirada hacia los años 70 para rescatar el corte  recto de los pantalones, las gafas XXL y las mangas acampanadas. La pureza de las forma no admite más adornos que los gráciles volantes que rematan los diseños. Tampoco hay lugar para el escote que, cuando no va cerrado al cuello, dibuja una austera línea recta en el pecho. Y, el elogio a la monocromía, que acaba inevitablemente en los sempiternos blanco y negro, sólo se rompe con la aparición del estampado de pitón y uno de tipo floral. En definitiva un trabajo pulcro a la elegante manera de la firma.





Marga cortes. Elige tu tocado

Es de A Coruña, SADA.
‘’Mi inquietud y mi personal activa me han llevado a buscar una nueva ilusión en mi vida, iniciándome en el diseño de tocados’’
Aquí os muestro sus diseños que son muy actos para cual evento. Espero que os empapéis de su originalidad.

Tocado fatima
Tocado en sinamay roca, con crim y velo color champagne, y pluma rosa


Tocado Raquel
Base de paja marrón chocolate con velo color oro y pluma de pavo real.


Diadema marta
Diadema en color morado, con plumas negras y moradas


Tocado Bombay
Casquete de sinamay negro, con cri plumeti rosa fucsia, biot negro y piedra negra tipo swarovski.
Para su sujección lleva peineta y presillas laterales.

                  

 Tocado ros

Tocado realizado en sinamay high nude y sinamay gris topo. Plumas en color rojo y high nude.

                  

Tocado miss grey

Tocado realizado en sinamay rosa palo, con lazo en sinamay gris perla. Plumas en dos tonos de gris.
Para su sujeción lleva peineta y dos presillas para poner horquillas.

Tocado claire

Casquete de sinamay color coral, con velo plumeti blanco, pluma color coral y botón dorado y blanco roto.
Para su sujección, lleva unas presillas laterales.

Aquí os dejo más tocados, en su último evento que tuvo lugar en la centrica Gran Vía de Madrid, las que estuvimos allí pudimos contemplar los excelentes diseños, espero que os guste y podaís elegir.







Balmain P//V 2013

En su tercera colección para la firma, Olivier Rousteing emprende un viaje a los 80 para rescatar las hombreras. Exageradas al extremo, desfiguran la silueta femenina que se estrecha en las piernas por obra y gracia de pantalones rectos o pitillo nacidos en la cintura. Un juego de formas que gana en esbeltez gracias a los estampados en damero, las rayas verticales y los diseños arquitectónicos. Los minivestidos y las prendas caladas o rotas -a medio camino entre la cestería y el punto abierto del croché- sirven de guiño al ADN de la 'maison' que el diseñador no hace sino homenajear.
 Balmain rescata el estilo de los ochenta: hombreras, cinturas marcadas, cuero negro y un guiño muy especial al cannage, que convierte los vestidos en verdaderas piezas escultóricas. Así es Balmain


Los ochenta han vuelto a la vida, más poderosos que nunca, en el desfile de Balmain. Sus siluetas triangulares, de hombros voluminosos y cinturas entalladas se llevan al extremo, combinados con tops estilo bandeau. Los minivestido sugieren ese aire sexy que esperamos de la firma, adornados con motivos barrocos, mientras que los trajes presentan estampados de rombos y rayas, en blanco, negro y amarillo.


 Sin embargo, el aspecto más inesperado del desfile ha surgido con la aplicación del cannage de las sillas a modo de calado en vestidos, chaquetas, tops y pantalones. De hecho, las sillas de mimbre se han convertido en vestidos, como si se hubieran deconstruido para transformarse en tela, en color blanco, dorado y beige. Son auténticas esculturas. La textura que ha surgido de estos diseños está llena de ricos matices, dando empaque y tridimensionalidad a estas salidas -y más aún cuando se combinan con chaquetas de cuero negro-. Por último, el denim en su tonalidad más oscura ha completado esta colección de tejidos.


Altísimos tacones y botines peep toe -que incorporan el mismo cannage de los vestidos-, cinturones de cuero con aplicaciones metálicas, hombreras y grandes aros a modo de pendientes... este es el imaginario ochentero de Balmain.