"Más vestido, menos sport". Así describe el diseñador de origen argentino sus propuestas, en las que introduce el crepé y los estampados florales y el vestido barre al pantalón. Una colección "optimista", pensada para una clienta que demanda "ropa que perdure y aúne diseño y materiales de calidad". Los accesorios cobran protagonismo: shopping bags de ante o napa y bolsos joya y brazaletes barrocos firmados por Titina Meyer. "Y siempre con taconazo de 10 centímetros de altura". En eso, el modisto es inflexible.
Vuelta a la diadema
Eyeliner exageradamente horizontal, párpado impoluto y labios en rojo intenso: así es la belleza según Roberto Torretta. El peinado (todo un acierto) reivindica el regreso a las diademas; las del desfile son apenas una tira de tul negro. Este accesorio completa un elegante look de coleta planchada y muy pulida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario